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Que es la ignorancia
Peligros de la ignorancia
ResumenEste artículo ofrece un análisis de la ignorancia. Tras un par de observaciones preliminares, intento mostrar que, en contra de lo que cabría esperar y de lo que suponen casi todos los filósofos, ser ignorante no equivale a no saber, al menos no en uno de los sentidos más fuertes del conocimiento. Posteriormente, ofrezco dos definiciones de la ignorancia y sostengo que la definición de la ignorancia depende fundamentalmente de la explicación que se haga de la creencia. Finalmente, ilustro la relevancia de mi análisis prestando atención a cuatro problemas filosóficos en los que la ignorancia juega un papel crucial.
Philosophia 38, 57-67 (2010). https://doi.org/10.1007/s11406-009-9202-8Download citationShare this articleAnyone you share the following link with will be able to read this content:Get shareable linkSorry, a shareable link is not currently available for this article.Copy to clipboard
Persona ignorante
Para otros usos, véase Ignorancia (desambiguación).La ignorancia es una falta de conocimiento e información. La palabra «ignorante» es un adjetivo que describe a una persona en estado de ignorancia, o incluso de disonancia cognitiva y otra relación cognitiva, y puede describir a individuos que desconocen información o hechos importantes. La ignorancia puede presentarse en tres tipos diferentes: ignorancia fáctica (ausencia de conocimiento de algún hecho), ignorancia de objeto (desconocimiento de algún objeto) e ignorancia técnica (ausencia de conocimiento de cómo hacer algo)[1].
La ignorancia puede tener efectos negativos en los individuos y las sociedades, pero también puede beneficiarlos al crear en ellos el deseo de saber más. Por ejemplo, la ignorancia dentro de la ciencia abre la oportunidad de buscar conocimientos y hacer descubrimientos planteando nuevas preguntas[2], aunque esto sólo puede tener lugar si el individuo posee una mente curiosa[cita requerida].
Los estudios sugieren que los adultos con una educación adecuada que desempeñan trabajos enriquecedores y desafiantes son más felices y tienen un mayor control de su entorno[3] La confianza que obtienen los adultos gracias a la sensación de control que les proporciona la educación les permite optar a más puestos de liderazgo y buscar el poder a lo largo de su vida[cita requerida].
Estupidez
Ignorante comparte una raíz con la palabra ignorar, una de esas conexiones etimológicas que parecen obvias una vez señaladas, pero que la mayoría ha pasado por alto. Ambas palabras proceden del latín ignorare («ignorar, desconocer»). Hay varias acepciones de ignorante, todas ellas relacionadas con la falta de conocimiento en algún sentido; algunas de ellas son más insultantes que otras, y hay que tener cuidado antes de aplicar esta palabra a personas a las que no se quiere ofender. Decir «Eran ignorantes de la mayoría de las leyes de la física» significa que las personas en cuestión no tenían un conjunto de conocimientos específicos. Decir «Eres un ignorante» es posiblemente describir a alguien como primitivo, tosco o incivilizado.
… las Series Mundiales de la era de los comodines son el tirón de la palanca de una máquina tragaperras, un juego de azar ignorante de la forma. Ahora está poblada regularmente por clubes de segunda fila o equipos del mes más que por franquicias dominantes de la temporada regular …
Al ocultar su embarazo, Lani ilustró lo mucho que importan las apariencias en el ecosistema del espectáculo y cómo, aunque todo parezca estar bien, la gente suele ignorar lo que puede estar bullendo bajo la superficie.
Ejemplos de ignorancia
Para otros usos, véase Ignorancia (desambiguación).La ignorancia es una falta de conocimiento e información. La palabra «ignorante» es un adjetivo que describe a una persona en estado de desconocimiento, o incluso de disonancia cognitiva y otra relación cognitiva, y puede describir a individuos que desconocen información o hechos importantes. La ignorancia puede presentarse en tres tipos diferentes: la ignorancia fáctica (ausencia de conocimiento de algún hecho), la ignorancia de objeto (desconocimiento de algún objeto) y la ignorancia técnica (ausencia de conocimiento de cómo hacer algo)[1].
La ignorancia puede tener efectos negativos para los individuos y las sociedades, pero también puede beneficiarlos al crear en ellos el deseo de saber más. Por ejemplo, la ignorancia dentro de la ciencia abre la oportunidad de buscar conocimientos y hacer descubrimientos planteando nuevas preguntas[2], aunque esto sólo puede tener lugar si el individuo posee una mente curiosa[cita requerida].
Los estudios sugieren que los adultos con una educación adecuada que desempeñan trabajos enriquecedores y desafiantes son más felices y tienen un mayor control de su entorno[3] La confianza que obtienen los adultos gracias a la sensación de control que les proporciona la educación les permite optar a más puestos de liderazgo y buscar el poder a lo largo de su vida[cita requerida].